No siento ni la más mínima coincidencia de que lo nuestro fue cosa del destino, que el tiempo quiso que esperáramos hasta que nuestras labios un día se encontraran y formaran parte de un solo labio,que las cosas más increibles solo fueran tuyas y mias y que nadie,que absolutamente nadie fuera a decidir que quiere nuestro amor en ese momento. El destino no nos unió, solo fue cosa de los dos, cosa del momento oportuno...
No hay comentarios:
Publicar un comentario